El fiscal federal Eduardo Taiano ha iniciado una investigación para determinar si hubo estafa y tráfico de influencias en la promoción del token $LIBRA por parte del presidente Javier Milei. Para ello, ha convocado a la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia del Ministerio Público Fiscal de la Nación, con el objetivo de preservar y recuperar evidencia digital relevante para el caso.
Entre las primeras medidas adoptadas, Taiano ha solicitado informes al Banco Central, la Comisión Nacional de Valores y la Inspección General de Justicia, así como a empresas privadas como Google, para identificar a las firmas involucradas en la comercialización de $LIBRA.
El escándalo, conocido como «criptogate», se desató cuando Milei promocionó $LIBRA en sus redes sociales, lo que llevó a una rápida apreciación del token seguida de un desplome abrupto. Se estima que más de 40.000 inversores resultaron afectados, con pérdidas que superan los 4.000 millones de dólares.
Además de las acciones judiciales en Argentina, estudios jurídicos internacionales están preparando demandas colectivas en representación de inversores extranjeros que sufrieron pérdidas significativas tras el colapso de $LIBRA. Estas firmas buscan agrupar a afectados de diversas jurisdicciones para presentar casos en tribunales internacionales, argumentando que la promoción de la criptomoneda por parte de Milei constituyó una práctica engañosa que llevó a inversiones perjudiciales.
Mientras tanto, el presidente Milei ha negado cualquier irregularidad y ha solicitado una investigación para esclarecer los hechos. Sin embargo, la oposición ha presentado una denuncia penal en su contra por presunta asociación ilícita, estafa e incumplimiento de los deberes de funcionario público, y ha anunciado un pedido de juicio político.
La investigación continúa en curso, y se esperan nuevas diligencias en los próximos días para esclarecer los hechos denunciados.