La crisis económica golpea también a los clubes de fútbol. En Newell’s, unos 200 empleados de distintas áreas —mantenimiento, servicios y administración— reclaman el pago de los salarios de agosto, que todavía no fueron abonados.
El conflicto fue denunciado por UTEDYC, el sindicato que nuclea a los trabajadores del deporte. Su abogado, Diego Marcón, advirtió que a pesar de los múltiples reclamos y promesas de pago, “no se concretó ninguna solución”, lo que genera serias complicaciones económicas para las familias afectadas.
Por ahora no hubo despidos, pero la situación se volvió insostenible y el gremio no descarta medidas de fuerza en los próximos días, que podrían impactar en el funcionamiento del estadio, las sedes sociales y hasta en los partidos si no se destraba el conflicto.