La parroquia Natividad del Señor, liderada por el reconocido sacerdote Ignacio Peries, fue blanco de un ataque incendiario en la madrugada de este domingo. Al menos dos personas arrojaron una bomba molotov contra la fachada del templo, ubicado en el barrio Rucci, generando daños materiales y conmocionando a la comunidad.
Junto al explosivo, los atacantes dejaron una nota firmada por «La mafia», en la que exigían la liberación de Marcelo «Frentudo» Fernández, presunto líder de una banda criminal detenido el jueves pasado. Aunque no se registraron heridos, el hecho provocó un fuerte repudio de los vecinos y la Iglesia Católica.
Un ataque en un contexto de creciente violencia
Este incidente se suma a una alarmante escalada de violencia en Rosario, marcada por tiroteos, extorsiones y ataques contra instituciones religiosas. La parroquia Natividad del Señor, conocida por su labor social y liderada por el padre Ignacio, es un símbolo de contención y apoyo en la comunidad, lo que hace que el ataque resulte aún más impactante.
Durante los últimos meses, se han registrado múltiples agresiones contra la Iglesia en Santa Fe, incluyendo amenazas y actos de vandalismo. Además, permanece sin resolver la muerte del sacerdote Carlos José Sala, quien fue atacado por delincuentes en la ruta, sumando incertidumbre y temor en el ámbito religioso.
Investigaciones en curso
La policía y la Fiscalía ya trabajan para identificar a los responsables del ataque a la parroquia del padre Ignacio. Fuentes cercanas al caso no descartan que el hecho esté vinculado con intentos de presión de las bandas criminales hacia el sistema judicial tras la detención de Fernández.
Mientras tanto, la comunidad del barrio Rucci se prepara para una jornada de oración y reclamo de justicia. En sus primeras declaraciones tras el ataque, el padre Ignacio llamó a la paz y al diálogo, subrayando que «la violencia no es el camino».
Este nuevo episodio pone de manifiesto la necesidad urgente de soluciones concretas frente al flagelo del crimen organizado que mantiene a Rosario en vilo.