Se trata de Eduardo Lorenzo quien estaba acusado de abusos y sobre el que regía un pedido de captura desde el lunes.
El sacerdote católico se alojaba en una casa de la organización de igual religión llamada «Caritas» en la ciudad de La Plata, provincia de Buenos Aires.
El ex capellan penitenciario de buenos aires, estaba de licencia y apartado del contacto con adolescentes desde hace poco tiempo. El cuerpo de Lorenzo fue encontrado en la sede de Caritas que se encuentra entre las calles 4 entre 49 y 51, junto con un arma y manchas de sangre.
Fue confesor del cura Julio César Grassi, el sacerdote ya había sido denunciado en 2008 por abusos sexuales ocurridos en las iglesias San Benito y Nuestra Señora de Lourdes, también de La Plata, en campamentos que organizaba él mismo. En ese momento, once años atrás, el denunciante fue un menor de edad del hogar para chicos «Leoncito», aunque la acusación fue desestimada por falta de pruebas. Sin embargo, la aparición de nuevos testimonios reactivaron la causa este año y hoy mismo la jueza Marcela Garmendia había solicitado su detención luego de analizar su perfil psicológico, realizado por peritos oficiales.